El diseño editorial frente a los nuevos planteamientos de edición estructurada XML para los diferentes medios globales de distribución, divulgación e indexación

Técnico profesional de Preprensa Digital, Servicio Nacional de Aprendizaje, SENA. Técnico profesional en diseño gráfico, Corporación Universitaria Taller 5 Centro de Diseño. Diseñador editorial de libros y revistas de la Universidad Pedagógica Nacional de Colombia.

Resumen

El diseñador editorial siempre ha adaptado sus conocimientos a las tecnologías emergentes y no debería ser diferente este acoplamiento frente a la nueva propuesta de edición estructurada. La edición estructurada con xml es la combinación de un lenguaje de programación y un proceso editorial que ayuda a organizar la información para distribuir una publicación a distintos formatos y medios. Las funciones del diseñador no desaparecen con este proceso, como se podría creer, solo se modifican para dar prioridad al diseño y automatizar el proceso operativo de diagramación.

Introducción

La evolución del diseño editorial a lo largo de estas últimas dos décadas ha llevado a que el diseñador gráfico dependa y esté ligado a la utilización de herramientas tecnológicas para la realización y la posterior distribución de los diferentes productos editoriales. Este vertiginoso avance requiere de una rápida adaptación por parte del diseñador a las nuevas tecnologías y a nuevos conocimientos de diseño y de diagramación; especialmente, en la producción de libros y revistas con contenidos de investigación científica, que tienen unas características específicas de forma y cuyos objetivos finales son la difusión y la divulgación del conocimiento, en la mayoría de los casos, mediante acceso abierto a nivel mundial.

Una propuesta que plantea una nueva organización del proceso editorial es la “edición estructurada xml”. En esta, el papel del diseñador gráfico se simplifica y se reduce a la creación de plantillas configuradas para la adaptación del lenguaje xml a los formatos más populares de distribución como pdf, epub, html; así como a archivos para impresión editados con programas especializados en diagramación como lo es Adobe Indesign, que es el más utilizado actualmente[1], reduciendo considerablemente los tiempos de producción de los libros y revistas.

Este artículo pretende mostrar los cambios en los procesos de esta nueva propuesta editorial en el trabajo del diseñador gráfico, con respecto a la diagramación y la intervención en la exportación de los libros y revistas a los diferentes formatos de divulgación y distribución editorial.

Definición diseño editorial

El diseño editorial es la rama del diseño gráfico que se especializa en la construcción, composición, maquetación y diagramación de piezas gráficas como revistas, periódicos, libros, catálogos, folletos y demás material gráfico empleado para la producción de impresos. En la actualidad, este concepto no solo hace referencia a los impresos, sino que también incluye el material que se trabaja para medios digitales.

Daniel Ghinaglia (2009) precisa que el diseño editorial “incluye la realización de la gráfica interior y exterior de los textos, siempre teniendo en cuenta un eje estético ligado al concepto que define a cada publicación y teniendo en cuenta las condiciones de impresión y de recepción” (p.3). Se podría decir que su finalidad es lograr una unidad armónica entre las imágenes, los textos y la diagramación[2]. Cada publicación adquiere un carácter o personalidad estética, gracias al diseño proporcionado por el diseñador editorial, para llevar a un receptor final un mensaje específico.

A través del tiempo, el proceso evolutivo del diseño editorial se dio en forma lenta, durante el cual podríamos citar momentos de gran importancia como la aparición del lenguaje, la escritura, los manuscritos, el libro, la invención de la imprenta, la conformación de talleres de publicaciones (litografías), y muchos más eventos que a lo largo de varios siglos fueron importantes en la historia de la edición; pero, no es hasta finales del siglo xx y durante esta última década que se han presentado avances importantes de manera muy rápida y que van ligados a la aparición de las nuevas tecnologías y la Internet.

La permanente evolución del diseño editorial en los últimos años ha llevado a una adaptabilidad por parte del diseñador gráfico, y a una adecuación de los métodos y los procesos en la diagramación de los productos editoriales. Hace veinte años, por ejemplo, la producción editorial era muy diferente a lo que es actualmente; se trabajaba de una manera mecánica poco sistematizada, donde la mayoría del trabajo era manual y dependía directamente del factor humano: diseñadores, montajistas o maquetistas y arte-finalistas.

A finales de los años noventa, con la masificación de los ordenadores y la rápida evolución de software y la aparición de los lenguajes de programación, se incorporan al proceso de diagramación nuevos programas y equipos que facilitaron la producción y redujeron considerablemente los tiempos de entrega de los productos. Esta evolución llevó a la capacitación de los diseñadores en programas específicos para la diagramación como lo fueron QuarkXpress, Freehand, PageMaker y Coreldraw. Grandes compañías con poder adquisitivo como Adobe compraron las empresas más pequeñas y fusionaron programas como Freehand y Page-Maker para crear un software mucho más completo que abarcara herramientas y solucionara los diferentes problemas a la hora de diagramar, exportar y compartir archivos, como es el caso de Adobe Indesign.

El nacimiento de nuevos sistemas de almacenamiento y distribución de archivos como cd-rom, dvd, y posteriormente las Memorias usb, combinados con hardware de captura de imágenes y los nuevos sistemas de impresión digital, facilitaron la vertiginosa aceleración de procesos de producción, dando inicio a la nueva era de la edición digital.

En sus inicios, la edición digital, que nació con los procesadores de texto en los años ochenta, rápidamente vio la necesidad de mejorar su apariencia y su estética para la producción de los libros de forma más profesional. Según Santa Ana (2016)

(…) los procesadores de texto trasladaron la mecanografía con creces. Ya no solo se trataba de la introducción de texto, el software posibilitó herramientas que en la actualidad se consideran innatas a cualquier procesador: copiado y pegado, búsqueda y reemplazo, división del documento por páginas, personalización de las características de la página, inserción de imágenes; estilos directos que cambian el tamaño, peso y tipo de fuente, etcétera. A pesar de ello, no todos los usuarios estaban satisfechos. La calidad y el cuidado editorial dejaba mucho que desear. Nadie dudaba que mediante el procesador de texto se creaban documentos de oficina o trabajos escolares de calidad superior, pero para la publicación de libros o artículos académicos esto representaba un retroceso. (p. 12,13).

Para mediados de los años ochenta nace un concepto que consolidaría y aproximaría al diseño digital editorial en lo que es hoy el wysiwyg (What You See Is What You Get). Con este se le da una mayor flexibilidad a la manipulación de los textos mediante la introducción de estilos directos y se explora, con las nuevas versiones de software, la creación de diseños en las nuevas publicaciones. A esto, Santa Ana (2016) añade que “Esta versatilidad no solo permite al usuario visualizar inmediatamente sus modificaciones, sino que también respeta el formato hasta su impresión. Lo que ves en la pantalla, es lo que obtienes en el papel”. (Santa Ana 2016, p. 20).

Es decir que, en los documentos, tanto Word de Microsoft como InDesign de Adobe son programas en los que, aquello que se ve en pantalla es fiel reflejo del resultado final. Cuando se exporta un PDF para imprenta desde InDesign no se tiene ninguna duda –si su realización es correcta– de cómo será el resultado en papel.

En la actualidad, con la aparición de los formatos de libros digitales pdf, ePub, los cuales se crearon para la visualización en dispositivos digitales en lectores de libros como Kindle, tabletas, Ipads y hasta dispositivos móviles, como los celulares, el diseño editorial se ha ampliado y se ha abierto a un abanico de posibilidades en forma, color y distribución del contenido. Para Ruiz (2014), lo anterior genera un problema al momento de la construcción y de distribución a los diferentes formatos y medios de divulgación.

Las herramientas WYSIWYG ofrecen un control absoluto del resultado final de una obra impresa, pero casi no ofrecen nada para el resto de ventanas y entornos de publicación. No sólo se debe contar con la dicotomía entre libro de papel y libro digital, también se debe tener en cuenta nuevos entornos de lectura en redes sociales, tabletas y smartphones, mediante descarga de archivos o lecturas en la nube. El nuevo escenario implica responder a los formatos actuales pero también a los futuros y, bajo ese prisma, es suicida seguir ligados a herramientas pensadas sólo para publicar los mejores libros de papel. Con dichas herramientas el texto editado es texto muerto en otros formatos. Por mucho que las últimas versiones incorporen opciones de exportación a formatos digitales el modo de trabajo que imponen es ajeno al nuevo paradigma. (Bernat Ruiz Doménech, 2014)

Por esta razón, se han creado no solo software para la conversión a diferentes formatos de exportación, sino que se está trabajando en algunos sectores editoriales a nivel mundial, en el planteamiento de procesos de edición y diagramación que faciliten la distribución y posterior visualización de los materiales (libros, revistas, catálogos y demás) creados con la mayor fidelidad y calidad de la información.

Para que los documentos tengan el formato correcto se necesita incluir un código o ser etiquetados (marcados). Los programas que dan formato reconocen estos códigos para que puedan incluirse los formatos correctos para los distintos tipos de salida, ya sean impresos o digitales. Para esto, se recopilaron lenguajes estandarizados de etiquetado, que permitieran un marcado sistemático del texto.

XML

xml (Extensible Markup Language), que significa ‘Lenguaje Extensible de Marcado’, es un “metalenguaje”, lo que quiere decir que no es un código en sí, sino una manera de escribir los sistemas de códigos. Se basa en el etiquetado de elementos, es decir, que cada parte de la información contenida en un documento se separa entre unas etiquetas que le darán un valor o unas características específicas a la hora de interpretar los textos en un visor, como en un computador, una tableta o en cualquier medio digital capaz de interpretar este lenguaje. Por ejemplo, <Nombre>Eliana</Nombre>, <Título>Diseño Editorial</Título>, en donde la información contenida entre cada etiqueta es aquella que será visible por el espectador, y las etiquetas son los textos no visibles que interpreta cada dispositivo en el que se verá la información.

La utilización de xml permite una mejor comunicación y la organización entre los diferentes sistemas de información logrando una mayor integración y eficacia en la interpretación de datos. Gómez (2007) desglosa y define este lenguaje de la siguiente manera

-Podemos definir “lenguaje” como cualquier estructura abstracta usable para comunicar simbólicamente y que tiene interpretación semántica, en términos de la informática, un lenguaje de programación es un conjunto finito de cadenas de símbolos, adicionalmente podemos definir un lenguaje como las diversas formas de representar cosas.

-Podemos definir “marcas” como las señales que se agregan a un texto para que este adquiera la connotación de comando y sirva para especificar un propósito definido, de esta forma se enriquece la caracterización plana que poseen los textos normalmente, ya que mediante las marcas se puede aplicar procesos al texto que resaltan las marcas, en xml las marcas están delimitadas por los símbolos “<” y “>”.

-Podemos definir “extensible” como la capacidad de crear tantos lenguajes y comandos de marcas como se desee, de acuerdo con el objetivo de especificar un dominio de aplicación que permita estructurar la información y los documentos tan detalladamente cómo se necesite, xml no especifica un conjunto válido de marcas, sino que ofrece las reglas que nos permiten crear nuevos vocabularios o conjuntos de marcas aplicables para la codificación de distintos tipos de documentos. (Gómez, 2011, p.108-109).

Un lenguaje de marcas es un mecanismo para identificar estructuras en un documento. La especificación XML define una manera estándar de añadir marcas a los documentos. En XML las etiquetas definen la estructura y el significado de los datos.

Lapuente (2013), resalta algunas características de la utilización del lenguaje XML

La información en XML está mucho más estructurada, esto facilitará enormemente la labor a los buscadores y los robots y agentes inteligentes, que accederán a los datos de manera más precisa. Los enlaces bidireccionales y almacenados de forma externa, la existencia de enlaces agrupados, atributos de los enlaces, los enlaces que pueden especificarse y gestionarse desde fuera del documento y el resto de funcionalidades que ofrece el lenguaje XLL (Lenguaje de Enlaces Extensible) permitirán ampliar el concepto de hipertexto ya que la denominación no dependerá de la ubicación. Una de las características más importantes de XML en relación al hipertexto es la inclusión de enlaces multidireccionales (que apuntan a varios documentos). Y por último, hay que tener en cuenta la exportabilidad de XML a otros formatos de edición, ya que el documento maestro de la edición de un documento XML podría ser exportado de forma directa tanto a la Web como para su edición en papel, CD-ROM, etc.

Entre las ventajas de adoptar XML se destacan las siguientes: los autores o proveedores pueden diseñar sus propios documentos a medida, al diseñar sus propias etiquetas dependiendo de las funciones que quieran dar a los datos. La información contenida en un documento XML puede ser más rica y fácil de usar porque las habilidades hipertextuales de XML son mayores que las de HTML. La información será más accesible y reutilizable porque la flexibilidad de las etiquetas de XML puede utilizarse sin tener que amoldarse a las reglas específicas de un fabricante como es el caso de HTML. Los archivos XML válidos también pueden utilizarse fuera de la Web en entornos locales.  

Editoriales universitarias y el contenido científico

Una parte del diseño editorial en la que se puede presentar gran afluencia de material para trabajar en el diseño es en la edición universitaria. En esta, los artículos de revistas científicas y los libros de investigación son una gran oportunidad para desarrollar diseños que complementan el contenido, para hacerlos más atractivos a la vista del público.

Así lo señala la presentación de la primera edición del Foro de Edición Universitaria. Editar, publicar y divulgar conocimiento, realizado en la Feria Internacional del Libro de Bogotá, (Editar, publicar y divulgar conocimiento científico – Foros del libro. 2017).

La edición universitaria es uno de los sectores más prolíficos del campo editorial: según las Estadísticas del Libro en Colombia, publicadas por la Cámara Colombiana del Libro, las universidades colombianas pusieron en circulación en el año 2015 alrededor de 3630 títulos editoriales que abarcan más de 1000 temáticas: desde Astronomía hasta Zootecnia, pasando por áreas tan diversas como análisis del conflicto e historia de la edición nacional en el siglo xviii. (2017, párr. 2).

Estos datos dejan ver el amplio campo de la edición universitaria en Colombia y la oportunidad que tienen los diseñadores del país para participar en los procesos de publicación de estas. En el contexto editorial de la Universidad Pedagógica Nacional, por ejemplo, las características de la estructura a tener en cuenta a la hora de diseñar y diagramar sus publicaciones son: a) los niveles de titulación del texto, b) los autores y su respectiva información, c) los títulos traducidos a los idiomas exigidos por la revista o libro a publicar, d) el resumen y su traducción a un segundo o tercer idioma, d) las citas, las fechas de entrega y publicación del documento, e) las notas al pie de página, f) los gráficos y las imágenes y su respectiva información de donde fueron obtenidos, g) las tablas y los anexos, y h) la bibliografía e índices. Estos datos, entre otros, son los que conforman la estructura base de cualquier publicación científica y permiten la indexación óptima, que es la manera de organizar los documentos para facilitar su búsqueda y posterior citación en nuevos documentos de investigación.

Diseño Editorial en la Universidad Pedagógica Nacional de Colombia

En el Grupo Interno de Trabajo Editorial (GED) de la Universidad Pedagógica Nacional se reciben aquellos documentos investigativos que la universidad desea divulgar por su interés a nivel científico, estos son aprobados por medio del Comité de Propiedad Intelectual y de Publicaciones. Entre las publicaciones de este grupo se encuentran los artículos de investigación para cada una de las revistas, los trabajos que son producto de alguna investigación, las tesis doctorales o los trabajos de grado que serán publicados como libros. Desde el comité, se realizan convocatorias de publicación de los libros, en las que los documentos se someten a una revisión de pares evaluadores externos y a una evaluación editorial por parte de los editores del ged, teniendo en cuenta diversos aspectos establecidos en formatos institucionales. Si superan estos pasos, se envían los manuscritos aprobados a corrección de estilo, allí pueden tardar entre una y dos semanas. Después, los editores del ged revisan los textos nuevamente y le dan el ajuste a la línea de cada colección a la cual se desea publicar el libro, se revisa la estructura del documento, los niveles de titulación, la citación, las gráficas, las tablas y las imágenes que acompañan el trabajo y su pertinencia en la publicación; en este proceso de edición, los archivos se demoran entre una y dos semanas. Después de este tiempo, el texto pasa a diseño y a diagramación; aquí, el diseñador recibe los archivos en formato Word, junto con las imágenes en alta resolución, los gráficos y los complementos que se van a diagramar.

Si el libro hace parte de una colección que ya existe, se toma la plantilla de InDesign que ha sido construida con anterioridad y se diagrama sobre esta. Si el libro pertenece a una colección nueva, se realiza el diseño de la plantilla con los estilos tanto, de párrafo, como de caracter; además, se diseña toda la estructura gráfica, es decir, los elementos visuales que le darán “personalidad” al libro como lo son las cornisas, los folios, los inicios de capítulos, las portadillas, los colores o las tintas en las que se trabajará el libro, etc. Después de construir la plantilla y crear la pauta, el diseñador comienza con el proceso de diagramación, que implica tomar los textos del archivo de Word e importarlos al InDesign y distribuirlos dentro de los espacios designados anteriormente en la plantilla, asignándole a cada parte un estilo de párrafo o de caracter, según corresponda. Al finalizar esta diagramación, se realizan las páginas preliminares: la falsa portada o portadilla, la página legal o bandera, las páginas de agradecimientos y la tabla de contenido. Posterior a esto, se realizan los índices del libro para terminar con el proceso de diagramación del contenido. Después de tener el contenido diagramado, se trabaja en el diseño de la portada, aquí el diseñador debe tener en cuenta el tamaño del libro, saber si lleva solapas[1] o no y conocer la información que se debe colocar en ellas; igualmente, se debe conocer la imagen o la ilustración que llevará o si solamente se realiza un diseño tipográfico o de formas.

Una vez terminado lo que se nombró anteriormente, se realiza un documento pdf preliminar para que se envía a los editores, quienes revisan el texto y se lo envían al diseñador con las correcciones del documento. Este, realiza las respectivas correcciones para enviar nuevamente el archivo en formato pdf, y se repiten estos pasos hasta dejar el documento listo y aprobado para su producción, ya sea digital o impresa, finalizando los archivos para cada medio en el que será distribuido. El proceso anterior podría tardar de semanas a meses dependiendo del número de correcciones que se realicen al documento. En la gráfica siguiente se muestra el proceso tradicional de una publicación.

[1] Las solapas son casi siempre los extremos de la cubierta, sirven para que la pieza permanezca bien sujeta al libro y es común que las solapas lleven texto, como puede ser una breve explicación de la obra, una descripción del autor o publicidad de la colección. (Buen Unna, 2003, p. 359)

[1] En la siguiente website se explican los motivos de su posicionamiento como líder del Mercado editorial: http://xpert.co/indesign-10-anos-como-lider-diseno-publicaciones/

[2] Según el Pequeño diccionario del diseñador, se define diagramación como la “distribución u organización de los elementos de un mensaje bimedia (texto e imagen) en un espacio bidimensional mediante criterios de jerarquización de la información buscando funcionalidad del mensaje (fácil lectura) bajo una apariencia estética agradable” (Design, 2017. p. 38).

Gráfica 1. Proceso convencional de edición de un libro o artículo de investigación.
Fuente: Elaboración Propia.

Nueva visión e implementación del método Metopes en el grupo editorial 

En el Taller “Open Editions” de edición digital, ofrecido por el responsable del proyecto Metopes, Dominique de Roux[1], realizado en la Feria Internacional del Libro de Bogotá (FilBo) en el año 2016, ASEUC[2] presentó a los editores y diseñadores de las editoriales universitarias de Colombia un nuevo modelo del proceso editorial que se está implementando en Europa, liderado por Francia, en donde se propone una “edición estructurada” utilizando el lenguaje de programación XML para etiquetar cada parte que conforma la estructura de un libro (títulos, párrafos, citas, notas al pie de página, tablas, gráficos, índices, etc.) para posteriormente poder leer e interpretar estos datos etiquetados en diferentes formatos, programas y plataformas, y organizarlos de forma que se adapten a ellos.

En un segundo Taller realizado en el 2017 en la ciudad de Cali Colombia; se profundizó en el funcionamiento de esta nueva propuesta de edición “El modelo consiste en una estructura simplificada del flujo de trabajo de XML, en la cual un archivo de XML es usado como las bases para el impreso, el e-book y la versión web de la publicación” (ASEUC, 2016), en donde los documentos en Word son procesados, convertidos e integrados de forma correcta dentro de cada versión antes de la publicación. En el taller, de Roux también trató temas como: métodos y herramientas para la edición estructurada, elementos de contexto institucional, contexto editorial, edición y digitalización.

En la implementación de este método en un libro del ged,  se aplicaron las etiquetas en el documento de Word que ya había tenido la corrección de estilo y las revisiones del editor, se convirtió el documento a XML con una aplicación de conversión de archivos que no tarda más de un minuto en convertir el documento, realizando una comprobación a todos los ítems que se etiquetaron en el Word y generando un documento óptimo para la diagramación y publicación, seguido a este proceso se trabajó en el diseño de la plantilla de Indesign en donde se prepararon todos los estilos de párrafo y de carácter, las cornisas, los folios y demás elementos de diseño del libro. Para importar el documento se instala un script[3] que se encarga de relacionar el documento XML y la plantilla Indesign seleccionada; al ejecutar el script, se realiza la diagramación del libro en un tiempo de 3 minutos para diagramar 340 páginas, reduciendo el tiempo de manera impresionante; para la creación de los documentos PDF, ePub y Html el proceso es aún más sencillo, dentro del programa de conversión de XML hay unos botones destinados para la creación de cada uno de ellos, en donde al hacer un clic se crea el documento en cuestión de segundos con toda las características necesarias del medio al cual va destinado.

Con este proceso se puede dar solución, en el contexto de la edición universitaria, a los textos a estructuras complejas, a la estabilidad de las citas y a la reducción de los tiempos de los procesos; dentro del campo digital, da solución a la perennidad de los datos y la información contenida en los documentos y al reto de la edición digital multisoportes con la fidelidad de que todos los documentos publicados tienen la misma información en todos los medios de divulgación.

En la siguiente gráfica se muestra la estructura del nuevo proceso propuesto de edición estructurada metopes, donde se puede observar que el eje del proceso es el documento XML que  desplaza el proceso del diseñador (Indesign) y lo relega a un medio de salida, al igual que un ePub, Html y demás.

[1] Responsable Editorial de la Université de Caen-Normandie, miembro de la Aedres, Coordinador de la BSN7 y Responsable del IR Numedif: proyecto Metopes.

[2] ASEUC-Asociación de Editoriales Universitarias de Colombia

[3] Un script es una serie de comandos que le dice a Indesign que realice una o más tareas. Un script puede ser tan sencillo como una tarea común automatizada o tan complejo como toda una función nueva. Se Pueden crear scripts propios y ejecutar scripts que hayan creado otras personas.

Gráfica 2. Proceso del flujo de trabajo XML de edición de un libro o artículo de investigación.
Fuente: Elaboración propia.

Resultados del taller y nuevas perspectivas para el diseñador

Como resultado de la aplicación de este nuevo procedimiento, se establece la necesidad de replantear las fases de las publicaciones, en donde los editores adicionan a su proceso la asignación de los estilos y sus correcciones en al documento de Word. Por otro lado, se podría pensar que la mano del diseñador desaparece frente a este proceso ya que la diagramación semiautomática[1] que realiza el programa de Indesign en tiempo es imposible de igualar. Pero es entonces donde se debe redireccionar la proyección del trabajo del diseñador hacia las plantillas y su correcto funcionamiento ya que sin ellas de nada sirve la edición estructurada.

Por esta razón el trabajo del diseñador es importante y esta supuesta automatización no es real, ya que necesita de un diseño y preparación previa de las plantillas con todos los elementos necesarios para la perfecta sincronización entre el documento XML y el archivo de Indesign. También es claro que se necesita una nueva capacitación y un nuevo planteamiento en la educación de los diseñadores gráficos que se interesen en el diseño editorial, prestando más atención al diseño estructural de los libros y revistas, acogiendo este nuevo proceso como una herramienta más de ayuda para agilizar procesos y no como un sustituto del diseñador.

Además, se puede tomar este nuevo proceso como una oportunidad de innovación ya que al ser novedoso y con muchos beneficios de ahorro de tiempo en las publicaciones, se puede buscar los espacios de capacitación y aplicación del proceso XML dirigido a editoriales y universidades interesadas en la aplicación de este método.

[1] Es semiautomática porque requiere de una creación previa de una estructura y diseño de una plantilla dentro del programa de Indesign, para que pueda reconocer los datos que provienen del documento de Word y hacer efectivo el scipt.

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